Pedidos de fábrica alemanes, ventas minoristas de la zona euro e índice PMI Ivey canadiense

El par EUR/USD registró pequeñas ganancias al finalizar la sesión con una subida del 0,14% y encontró apoyo en las expectativas de línea dura del Banco Central Europeo y la debilidad del dólar estadounidense.

La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, indicó que era probable un aumento adicional de las tasas de interés ya que no hay evidencia clara de que la inflación subyacente haya alcanzado su punto álgido. Esto sigue a los recientes comentarios agresivos de varios funcionarios del BCE que reafirmaron que el banco central no ha terminado de subir las tasas a pesar de una caída en la presión inflacionaria. Los participantes del mercado ahora esperan con interés la publicación de los datos de pedidos de fábrica alemanes y las cifras de ventas minoristas de la zona euro para determinar un nuevo impulso.

Por otro lado, el dólar estadounidense perdió fuerza después de la decepcionante publicación del PMI de servicios ISM de EE. UU., que cayó a 50,30 en mayo.

Los precios del oro cotizaron al alza el lunes, registrando ganancias del 0,61% después de los débiles datos del sector de servicios de EE. UU., que reforzaron las apuestas para que la Reserva Federal se mantenga firme en su política de tasas de interés de la próxima semana. El metal precioso se recuperó durante más de dos meses después de que los datos del lunes acabaran con meses de fuerte crecimiento a medida que el mercado laboral se quedó sin fuerza.

Pero, a pesar de las ganancias recientes, el oro se negociaba en gran medida dentro de un rango mientras los participantes del mercado esperaban la decisión sobre la tasa de interés de la Reserva Federal la próxima semana. El enfoque de esta semana está en la inflación y los datos comerciales de China, el último de los cuales se espera que brinde más pistas sobre la demanda de materias primas.

Los precios del petróleo subieron el lunes después de que el principal exportador mundial, Arabia Saudita, se comprometiera a reducir la producción en otro millón de barriles por día a partir de julio para contrarrestar los obstáculos macroeconómicos que han deprimido los mercados. El recorte voluntario se suma a un acuerdo más amplio de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados, incluida Rusia, para limitar el suministro hasta 2024, ya que la OPEP+ busca impulsar los precios del petróleo.

La carga alcista en los precios del crudo se desvaneció pronto. No obstante, los participantes del mercado consideraron los vientos económicos en contra – entre otros desafíos- como un factor que había contribuido a que este año fuera particularmente difícil para los compradores. El enfoque de esta semana también se centra en las lecturas económicas del principal importador de crudo, China.

Los principales índices de EE. UU. se negociaron entre ganancias y pérdidas el lunes, y el US 500 y el US 30 terminaron a la baja al final de la sesión, ya que los inversores sopesaron si la Reserva Federal de EE. UU. podría pausar sus aumentos de tasas de interés en su próxima reunión de política monetaria.

El US 500 y el US 30 finalizaron la sesión con un 0,21 y un 0,73% a la baja, respectivamente, mientras que el US Tech 100 creció menos al finalizar la sesión con un 0,20% al alza. En cuanto a los datos, el PMI de servicios llegó a 54,9 frente al 55,1 previsto, mientras que el PMI no manufacturero del ISM se situó en 50,3 frente al 51,8 previsto, lo que avivó el optimismo de que la Fed podría omitir el aumento de tipos a finales de este mes.